Noticia publicada en www.onmeda.es 02.04.14
Los nuevos tratamientos contra el VIH están consiguiendo que en casi la totalidad de los enfermos la carga viral sea indetectable.
Aunque hace unos años, los antirretrovirales se aplicaban solo en fases más avanzadas de la enfermedad, dados sus efectos adversos, los nuevos tratamientos han facilitado otra pauta terapéutica, en la que se aplican en fase temprana, “lo que, además de tratar al individuo, también es beneficioso para la colectividad, ya que conseguimos controlar la infección para evitar la transmisión a otras personas”, ha explicado hoy en rueda de prensa el Dr. Juan Berenguer, consultor de la Unidad de Enfermedades Infecciosas/VIH del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid.
“Los nuevos fármacos controlan más rápidamente la replicación del VIH, de modo que se logra que sea indetectable en 6-8 semanas, lo que es importante tanto para el contagio a otras personas como porque así se restaura mejor el sistema inmunitario del afectado”, ha destacado el Dr. Buenaventura Clotet, jefe de la Unidad de VIH del Hospital Germans Trias i Pujol en Badalona (Barcelona).
“Durante años, los medicamentos utilizados para el VIH provocaban cierta toxicidad sobre algunos órganos y causaban interacciones indeseadas. Hoy esto se ha superado con nuevos antirretrovirales, como los inhibidores de la integrasa, que no producen toxicidad y que reducen las interacciones indeseadas”, ha recalcado el Dr. Santiago Moreno, jefe del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.
Reducir los efectos adversos de la medicación es clave en el éxito del tratamiento contra el VIH, ya que “la mayoría de los infectados por VIH se sienten bien antes de saber que tienen la enfermedad. Por ello,los fármacos con mala tolerabilidad dificultaban la adherencia al tratamiento”, ha subrayado el Dr. Clotet.
Personas de mayor edad con VIH
Aunque los expertos insisten en que no hay que bajar la guardia en cuanto a la prevención (por ejemplo, usando siempre preservativo en relaciones sexuales no seguras), el VIH se ha convertido en una enfermedad crónica actualmente. Esto supone, según el Dr. Berenguer, que “las personas infectadas puedan tener unas expectativas de vida similares a otras no infectadas”.
En el mismo sentido, el Dr. Moreno ha puntualizado que “el sida se ha acabado como estadio terminal del VIH. Los pacientes con VIH cumplen años y desarrollan enfermedades propias de la edad”. No obstante, “el VIH produce un envejecimiento precoz del sistema inmunitario, por lo que un paciente de 50 años con VIH es, en realidad, como si tuviera 65. Esto no significa que haya más comorbilidades en casos de pacientes con VIH, sino que estas aparecen antes”.
Así, entre los pacientes con VIH son más frecuentes los cánceres (excepto el de próstata y mama), las hepatopatías crónicas, los problemas cardiovasculares, los daños renales, los trastornos neurocognitivos y las alteraciones óseas.
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